domingo, 10 de diciembre de 2017

Los amados y odiados "influencers"





Desde hace varios meses venimos escuchando la palabra "influencer" o "influenciadores", término o moda que causa discusiones ya que unos los defienden, otros los critican y otros los odian.

Primero, ¿qué es un "influencer"?: según san Google, se trata de una persona con cierto grado de credibilidad e influencia en redes sociales, por ello es que las marcas los buscan para que apadrinen sus productos, usen sus servicios, asistan a sus locales, fiestas, etc, etc, etc.

Esto no es nada nuevo, en nuestro país tenemos figuras que se han ganado el cariño de la gente y salen en anuncios, como Mauricio Montero, referente del fútbol nacional y autoridad para muchos seguidores de la Liga Deportiva Alajuelense.

Gracias a su trabajo muchas personas se han convertido en referentes, como Adriana Durán, periodista deportiva quien abrió camino a las mujeres en esa área y es respetada en el gremio, la doctora María Luisa Ávila quien hizo un gran trabajo como ministra de Salud y sigue siendo fuente de información, Franklin Chang Díaz, orgullo nacional por su carrera en la NASA y su trabajo con el motor de plasma.

Otros también han calado por su historia y empatía con la audiencia, como Daniel Del Barco, dueño de las tiendas de calzado del mismo nombre que comenzó vendiendo zapatos, Fitzgerald Haney, ex embajador de Estados Unidos en nuestro país quien tiene una personalidad encantadora y se echó a muchos al bolsillo con su carisma y creo que todos lloramos con la historia de su esposa y la lucha contra el cáncer de seno.

Sin embargo, surgen otras figuras cuyo único mérito es su cara bonita o pectorales, ellos también se están convirtiendo en "influencer", a ellos las marcas también los buscan para publicidad y les pagan por eso.

Como periodista me ha tocado ir a actividades donde son más los "influencers" que los medios, donde el trato es casi de estrella, donde me han arrebatado al vocero en media entrevista porque se tiene que tomar la foto con ellos.

Para mí un influenciador es una persona experta en un tema en específico, una persona que destaca en su área, que puede impartir cátedra, con una trayectoria respetable, cero escándalos en su currículum y que cuando ha estado en uno, acepta su error y sale como los grandes, ojo, me han diho "hater" por esto.

No se trata de odio, no se trata de envidia, se trata de opinión, ¿quién hace al "influenciador"?, nosotros como sociedad, la fama que le vamos dando y que los medios vemos y seguimos el pulso porque sabemos que una "noticia" de ellos nos genera tránsito.

Todos en mayor o menor grado podemos ser o somos uno: ¿acaso no conocen a ese familiar o amigo que organiza una reunión o fiesta y todos le llegan?, sí, tiene esa capacidad de convocatoria. ¿Recuerdan en la escuela o en el cole ese compañero que hablaba y lograba que la mayoría lo siguiera?, tenía ese poder de convencimiento, al rato sos vos y te lo han dicho en alguna ocasión.

"Influencer": término que llegó para quedarse por largo tiempo y convivimos con ello.

viernes, 21 de julio de 2017

La corona de la discordia







Pensé mucho en escribir esta entrada, leí varias columnas de espectáculos, comentarios y chistes, así que me animé y por supuesto el tema es Elena Correa, la Miss Costa Rica, su corona y su novio.

Ok, primero, para mi los concursos de belleza ni me fu ni me fa, no los veo, no me interesan, cada vez que había un Miss Costa Rica salían las quejas que estaba arreglado porque ganó la más fea o la de apellido rimbombante.

Teletica este año hizo el concurso a puerta cerrada y  fue designada una joven cuyo novio es empresario y millonario, ah sí, y 42 años mayor que ella.

Críticas porque el concurso fue cerrado, críticas porque no fue elección abierta, burlas porque el caballero supuestamente compró el concurso para su novia, críticas por la diferencia de edad.

Yo resumo todo en un ¿y qué???

Veamos:
  • Televisora de Costa Rica es una empresa privada, dueña del concurso, el dinero de la organización sale de sus arcas, así que puede hacer el concurso como le plazca
  • La única persona beneficiada con los premios, los cuales salen de las negociaciones de la organización y NO erario público, es la ganadora
  • Si usted o cualquiera tiene pruebas que esta edición o cualquiera de las anteriores fue comprada, primero ¿en qué le afecta? y si es tanta la indignación ¿ya puso la denuncia?
  • Un escándalo por la diferencia de edad entre la pareja, ¿y hasta ahora conoce una???, salga más seguido de su casa y verá muchas.
Por supuesto que la posición económica del señor llama la atención, ya a ella la califican de mantenida, seamos sinceras señoritas: ¿ustedes saldrían con un carajo que llega a un restaurante a pedir una coca cola y dos pajillas?, es más, ¿a cuántas les sugirieron alguna vez que buscara un chavalo con buena platica para no pasar necesidades?, lanzo otra, ¿quién de ustedes no ha rajado con algún regalo caro que le han hecho?

Ignoro si él paga todo, desconozco si le tiene lujos o si le "regaló" el concurso y si alguien me dice "¡por Dios no sea tan ingenua, si se nota a leguas!" asumo que es porque tiene en su manos los estados de cuenta del señor que lo prueban. 

¿Se indigna como costarricense porque el concurso fue cerrado?, a mí me indigna más que dos diputados de la República firmen una carta de apoyo al régimen de Nicolás Maduro, me saca más de quicio que en la democracia más antigua de Latinoamérica no podamos escoger de manera abierta a los congresistas.

Me hizo gracia un comentario que leí por ahí "¿qué pasa con la ilusión de las niñas que sueñan con ser princesas y modelos?", bueno, la cantidad de niñas en Juegos Nacionales, olimpiadas de robótica, matemáticas y ferias científicas demuestra otra cosa.

Y si sigue molesto, pues únase a la Carboni y protesten.



domingo, 2 de julio de 2017

La mañita de meterse donde no lo llaman

Uno de los deportes favoritos de esta sociedad, en especial la tica es meterse donde no la llaman, opinar cuando no se le ha pedido y sobre todo, juzgar.

Una amistad y su esposo lo viven, aunque de forma inteligente ha sabido sortear los ingratos comentarios acerca de sus decisiones de vida, en especial la de no ser padres, Juliana muy amable nos lo cuenta:

"Desde niña dije que no quería ser mamá, mis amigas jugaban con muñecas, me preguntaban cuántos hijos quería tener cuando fuera grande, mae, ¿a quién carajos se le ocurre hacer esa pregunta a una carajilla de 6 años que está botando los dientes de leche?

De adulta mi parecer no cambió, me dijeron que eso me iba a costar caro, no sé por qué, me enamoré de un hombre cuyo plan de vida tampoco incluye la paternidad y no le importó operarse antes de casarnos, era nuestra decisión. Cuando nos preguntan por los hijos y decimos que no queremos, de inmediato yo soy la bruja del cuento, la egoísta, la mala mujer, la que empuja al marido a la cama de otra para que la preñe y le dé hijos (ojo, darle, como si fuera un café).

Cuando él contesta que no puede tener hijos, lo hace al propio y se ahorra la razón, entonces cambia el discurso: pobrecito, qué le pasó, vamos a rezar por usted, con él sí hay compasión, nos indican los tratamientos y al decir que tal vez optaríamos por la adopción entonces la gente cae en cruz, porque cómo vamos a criar al hijo de otro.

La sociedad sigue viendo a los hijos como trofeos o como obligación, no como proyecto o plan de vida de una pareja o de una persona, las mujeres tenemos la obligación de engendrar y parir, de dar hijos, de hacer abuelos a nuestros padres, o sea, somos fábricas, no personas.

Si se quiere adoptar, como el caso de una de mis primas, también es criticada porque hijos solo los que se conciben, ¡ah!, pero a las parejas que demandaron al Estado por el tema de la FIV las tacharon de egoístas y las mandaron a adoptar, ¡uy gente doble moral!

Esta sociedad sigue sin superar ese tema, sigue opinando, mi vecina y su esposo optaron por no hacerle grandes fiestas de cumpleaños a los hijos, son dos, hasta que tengan 7 ú 8 años y disfruten, pero sobre todo, las recuerden, lo mismo con montarlos en un avión y llevarlos a Disney, ah pues ya los tachan de malos tatas porque los están privando de algo tan lindo como las fiestas temáticas donde hasta los calzones del cumpleañero es igual al diseño del queque, o sea, los chiquitos tienen 1 y 4 años, solo por las fotos sabrán que los vistieron de Woody o de Elsa.

En resumen señores, no se meta, no juzgue y no opine, que mi vida a usted y a los demás no le afecta, solo a mi, así que calladito más bonito"

domingo, 4 de junio de 2017

El poco aprecio por nuestra salud

Hace unos días tuve que ir a la clínica y me tocó estar cerca de un grupo de señoras a las que le estaban impartiendo una charla pre operatoria, ellas tenían que llenar varias fórmulas, entre ellas una hoja donde detallaban el procedimiento al que les iba a someter, alergias, enfermedades y operaciones anteriores.

Por un momento pensé que el enfermero iba a desmayarse: ninguna sabía de qué la iban a operar, desconocían el nombre del procedimiento, ni idea de las pastillas que se tomaban, una señora expresó "vea muchacho, yo tomo muchas pero me da pereza escribir los nombres entonces no lo voy a hacer mejor", ahí yo la iba a ahorcar.

Tampoco sabían qué era una operación y menos las alergias, en síntesis: todas eran ajenas a su expediente médico, mis respetos al enfermero, yo desde el minuto 1 estaba histérica.

Eso me recuerda las veces que el personal médico hace un llamado para las campañas de vacunación, pide actualizar datos, le recuerda a la población sus citas, pero por lo visto le hablan a la pared. En una ocasión entrevisté a una joven sobreviviente de cáncer de mama quien gracias a su cuidado militar descubrió un tumor el cual fue atacado a tiempo, ¿se imaginan si ella no se hubiese hecho el autoexamen?

Otra vez me fui a hacer un examen un poco incómodo y la frase del médico se me quedó grabado: "la salud a veces duele" y sí, nosotras las mujeres a veces nos sometemos a tratamientos estéticos dignos de instrumento de tortura, uso de tacones altos, exceso de químicos en el cabello, nos sacrificamos por la belleza y nos sabemos de memoria todos los "menjurges", pero nos es imposible saber qué pastilla nos causa alergia y claro, si algo pasa es culpa de los doctores por "inútiles".

Aprendamos a conocernos, hagamos preguntas, pongamos atención, no dejemos toda la responsabilidad en otra persona.

Aquí haré otro comentario, si alguien se enoja conmigo porque no soy mamá, me disculpan: todas las señoras tienen hijos por lo que pude escuchar, ignoro las edades, pero una de las recomendaciones del enfermero era reposo absoluto el día de la cirugía.  Así que todas decían que tenían que hacer el oficio antes, levantarse de madrugada para dejar desayuno, almuerzo y cena cocinadas, camas tendidas y ver quién ayudaba a los chiquitos con las tareas.

Yo para mis adentros me preguntaba: ¿por qué?, es decir, ¿tanto cuesta dividir funciones y enseñarle a todos los miembros de la familia, incluyendo niños, a ser responsables e independientes?...

Aprendamos a cuidarnos y chinearnos, a cuidar nuestra salud y sobre todo, entender que no somos indispensables y que el mundo sigue aunque una esté en cama, pensar en una no es malo, a veces es necesario.

viernes, 21 de abril de 2017

Yo no soy Eugenia y me disculpan por ello

Hace unos meses un amigo se compró un celular, días después me contó que para poder hablar con las personas era con el speaker. Lo acompañé a la agencia, le contó el problema a la señorita que lo atendió y ella le dijo que le quitara el plástico, ¡santo remedio!, el otro estaba muerto de risa, no haya ni dónde meterse de la vergüenza.

¿Por qué cuento esto?, para introducir el tema de la semana: la llamada de TIGO, aclaro que no conozco a la empresa, no sé cómo es su servicio, ignoro si a cada rato se va el internet, pero la forma en que la clienta habló y trató al operador me espanta.

Todos en algún momento hemos estallado: no responden en el banco, me acaban de robar la tarjeta y me hacen mil preguntas, se fue el internet, la luz, no hay agua, etc, etc, etc. Nadie me da una respuesta que me satisfaga y si me dicen que a las 10 am me restablecen el servicio y a 10:01 am no hay, a las 10:02 am llamo indignado porque "me mintieron".

El salonero me trajo la bebida con hielo y le dije que era sin, subieron el pasaje del bus y el chofer no tuvo la delicadeza de llamarme a mi celular para informarme del aumento, etc, etc. etc.

Entiendo el enojo de la señora, para quienes dependemos del internet para laborar es terrible que la conexión se caiga, quienes dependen de un VB es peor porque hay personas no se pueden esperar o te dicen que no es su problema que la conexión se cayera y vos tenés que solucionarlo porque para eso te pagan.

La forma en que la señora trató al operador es indignante, pero hay quienes la aplauden, en especial clientes de la compañía, aseguran que se lo merecen, repito, no los conozco, así que no puedo opinar.

Tampoco se puede negar el fallonazo en los protocolos de seguridad, quien o quienes filtraron ese audio se fueron con todo, violaron la confianza que la compañía depositó en ellos al contratarlos y le fallaron a la clienta.

Ahora también, yo no quisiera estar en el lugar de esta señora: te convertiste en el patito de la fiesta, ahora su foto y su enojo andan circulando en las redes, yo no sé cuántos memes me han llegado al WhatsApp, cuántos audios imitándola o haciendo mofa de sus palabras he escuchado.

Surge otra pregunta y es por qué la compañía reaccionó tarde, la regala de oro en Relaciones Públicas es que las crisis se atacan de inmediato, en especial en estos tiempos 2.0. ¿Cabe demanda por parte de la señora?, los expertos dicen que sí porque sus datos fueron revelados.

De este caso podemos sacar millones de lecciones, la más importante es que como sociedad somos cada vez más intolerantes y creemos que a gritos todo se soluciona, unos aplauden su actuar, otros lo critican.

Será el tema de la semana y del mes, y deja enseñanzas en muchas áreas.

* http://www.amprensa.com/2017/04/mujer-del-audio-de-tigo-es-la-primera-vez-que-me-tratan-tan-mal/

sábado, 1 de abril de 2017

¡¡Cómo hemos cambiado!!, ¿o has cambiado vos?

"Mirá, ¿y qué pasó con Laura?", le pregunté un día de estos a una amiga, esta muchacha y ella eran las mejores amigas del mundo, muy unidas, se conocían desde la escuela, yo tenía rato de no ver a esta chiquilla ni escuchar de ella.

"Te soy sincera, no sé, nos vimos en la fiesta de fulana, conmigo estaba como siempre y de repente se desapareció, no sé si se enojó por un comentario que le hice respecto a su casi necesidad de estar delgada o aquella majadería que le agarraba de comprarse cosas de marca, no sé, simplemente ya ni me habla", me contó ella bastante dolida.

Eso me puso a pensar en las veces que hemos tenido un amigo con el cual éramos bastante unidos y de un pronto a otro esa persona se va, ya no nos habla y ni sabemos qué fue el asunto, qué pasó, qué dije. Me ha pasado varias veces, tenía amistad con una pareja, a él lo conocí primero, erámos muy amigos, fuimos juntos a un paseo y de repente chao, si te vi ni me acuerdo, hasta de su lista de amigos del Facebook me borraron.

Dicen que quien encuentra un amigo, encuentra un tesoro, yo aveces pongo en tela de juicio ese refrán, ¿será que la gente de un día para otro cambia?, ¿será que dejamos de ser personas de interés?, porque al mejor estilo de las novelas mexicanas y películas de Hollywood eso suele pasar, a una excompañera de la universidad su gran amiga y compinche de pastoral le dejó de hablar porque de un momento a otro la niña se encontró una chavala que la andaba en carro para todo lados y como la mae tenía tanta plata, cuando se compraba ropa le regalaba a esta chiquilla la que ya no usaba y todo era de marca.

Es cierto, la vida es cambio, todos maduramos (bueno, algunos), pero a veces hay actitudes que extrañan y de cierta forma lastiman.

Alguien una vez me dijo "no hay que estar rogando amor ni tampoco amistad, si a uno lo quieren bien y si hubo un malentendido, que la persona tenga la confianza de decírtelo" y la verdad es que tiene razón.

Dejo ahí la reflexión del día y pensemos si estoy pasando por una situación similar, pero sobre todo si vale la pena o no tratar de avergiuar el por qué.

domingo, 19 de marzo de 2017

Cuando el pasado nos come




Hace unas tres semanas fue la reunión de excompañeras del colegio, sigo manteniendo mi grupo de amigas, de hecho es común en facebook ver fotos de las amistades que todavía se mantienen.

Pocos días después una conocida me comentó que ella nunca ha ido a las que sus excompañeros organizan, de hecho el colegio del cual se graduó suele hacer bailes y varias actividades para egresados, yo le pregunté por qué no iba, su respuesta: "porque el cole para mi fue lo peor, es más, a diferencia tuya o de mi esposo, yo no tengo contacto con nadie, sencillamente no los quiero ver". En resumen: ella era gordita, además tenía beca y esos dos aspectos siempre la acomplejaron.

Ahora es una mujer con una buena condición física que practica natación, profesional y hasta dueña de su empresa, pero sigue atada al pasado, así que me pregunto, ¿cuántos de nosotros lo estamos?

¿Quiénes seguimos sufriendo por cosas que pasaron hace mucho?, yo sé que todos tenemos nuestros sueños frustrados, anécdotas, algo que no logramos: el juguete que no nos pudieron comprar, esa persona que nos puso apodo o nos acomplejó por algo, la regañada injusta que nos llevamos por culpa del hermano, primo o vecino, etc, etc, etc.

Sí, puede que existan también situaciones que nos marcaran de por vida como un accidente grave, el abandono de alguno de los padres, la muerte de un ser amado, situaciones que a veces se nos hacen difíciles de manejar.

Sí, hay personas que siguen atadas al pasado, se niegan a dejar ese dolor o esa situación, hasta se niegan a buscar ayuda para salir adelante.

Hace unos días me tocó cubrir un evento de mujeres líderes y el cierre estuvo a cargo de Christiana Figueres, en su ponencia ella comentó que para poder triunfar es necesario superar.

Hagamos un examen de conciencia, revisemos nuestras cargas emocionales y analicemos si vale la pena seguir resentidos con personas que puede que ni se acuerden de uno o de lo nos hicieron, ¿no creen?

domingo, 29 de enero de 2017

“No me gusta estar sola”

Iba un día de estos en el bus, detrás de mí fulana y mengana conversando:

Fulana: ya está todo listo para la despedida de zutana, ya tenemos la reservación, “x” va a comprar los sombreros y antejos y “y” va a hacer el marco para las fotos, va a estar demasiado chiva…
Mengana: ¡ah bueno!, fulano y yo llegamos como a las 9 entonces, es que primero....
Fulana: ¿cómo que fulano?, a ver, ninguna va a llevar pareja, ni siquiera perenceja que está recién casada.
Mengana: ¡ah no, qué pena con ustedes!, pero ese mae va conmigo, para eso me lo conseguí, para no andar sola, eso de parejas que salen cada uno por su lado nada qué ver…

La conversación siguió, pero en mi mente quedó grabada esa última oración: “para eso lo conseguí, para no andar sola”, ¿cuántas veces hemos escuchado o dicho esa frase?, ¿cuántas veces  hemos depositado nuestras inseguridades en una relación sentimental, de amistad o incluso un trabajo con tal de no quedarnos solos?

Pareciera que, primero, las personas le tienen pánico a su propia compañía, verse solos ya sea en la casa o en una reunión es pero aterrador, sí, es lindo compartir, qué aburrido estar en una fiesta y no tener con quien conversar o bailar, pero el tema aquí es el miedo de estar con uno mismo.

Y es que no importa que estemos en la mejor compañía y en el lugar más bello de este mundo pasándola de lo mejor, si yo estoy incómoda con yo se me va a notar y me será imposible disfrutar del momento.

Este tema ya lo he tocado muchas veces y he recibido más de una crítica de personas cercanas a mí ya que según ellos les mando indirectas y les paso diciendo que se vayan solos a la playa o a un bar y no es eso, si lo quieren hacer se los recomiendo por cierto, es toda una experiencia. O también que critico el compartir con los demás, ¡tampoco!

El punto es el miedo a mi compañía, el pánico a mi yo, la necesidad de estar con alguien, el terror que se le tiene a la palabra “independencia” cuando se está en una relación; mientras yo le tenga miedo a yo, el mundo me parecerá un lugar terrible y me aferro a lo qué sea y  a quién sea, aunque me dañe.


No quiero hacer muy larga esta entrada, así que les dejo este link de una charla de Walter Riso titulada “La soledad afectiva”, no soy fans del él, pero lo que dijo me pareció súper interesante: Si no sabemos manejar la soledad, si no estamos acostumbrados a ella o si le tememos, seremos personas vulnerables en el amor, predispuestos a padecer con más intensidad el dolor de una separación, de una infidelidad o de un rechazo afectivo. https://www.elartedesabervivir.com/guias/como-afrontar-la-soledad-afectiva-29

domingo, 15 de enero de 2017

La hoguera digital



Como periodista titulada me ha tocado entrevistar a varios políticos, recuerdo que uno de ellos me dijo “nosotros siempre seremos culpables sin juicio, todo lo que hagamos estará mal”, esa frase se me quedó muy grabada.

Desde que tengo memoria recuerdo “conversaciones” en donde las personas simplemente despotrican: “es que fulano es un ladrón, corrupto, vago, claro por eso busca la muni (diputación, presidencia, lo que sea)”, estar en un puesto público no es sencillo, menos con cuatro millones de todólogos expertos con estudios en las mejores universidades del mundo y millones de millones de títulos.

El año pasado la Ministra de Justicia Cecilia Sánchez anunció la liberación de varios privados de libertad, automáticamente se convirtió en la villana de una sociedad que primero es machista; segundo, no tolera ver a una mujer en un puesto de autoridad; tercero, todo lo critica porque es perfecta y ellos sí tienen la solución, ellos sí saben.

Sánchez lidia con el tema de las cárceles, hace poco contó que recibió amenazas de muerte y violación, ya una vez un medio reseñó el “enfrentamiento” entre ella y un caballero por el tema de la liberación de privados de libertad.

Ahora vuelve a serlo, otro “hombre” le mandó un mensaje privado en dónde pide que ojalá le pase eso a ella y a su familia, los dañen a todos y otras perlas más (http://www.laprensalibre.cr/Noticias/detalle/100137/joven-llama-a-ministra-de-justicia:-pellejo-andante,-momificada)

Asumo que este señor es un experto en materia judicial, legal, toda una autoridad en materia carcelaria y que en su casa le enseñaron que así se dirige no solamente a una mujer, sino a una Ministra de Estado.

Por default el político (ministro, presidente, diputado, alcalde, etc) es mi enemigo, es un delincuente y yo tengo todo el “derecho” de expresarme de él con lo peor de mi léxico.

En diciembre José María Figueres publicó un vídeo en Facebook donde entre otras cosas mencionó que hay gente que lo trata de hijueputa, unas seis personas interpusieron recursos de amparo por semejante atrevimiento, pregunto: ¿qué pasaría si él o cualquier otro político, amparado por el Estado de Derecho, denuncie a quiénes lo llaman ladrón o corrupto?, porque los están acusando de un delito, eso se llama calumnia, ¿tendrán pruebas que respalden su berrinche, digo acusación?

Sinceramente señores, ¿la figura política es mi enemiga por qué?, ¿no me hace caso, no hace lo que yo quiero, lo escogieron a él o ella y no a mí?..

Ver estas expresiones da lástima, me parece que el tico puede ser más educado y sobre todo maduro, si usted no está de acuerdo con alguna directriz nada pasa, si usted cree que el ministro se la está “pelando”, perfecto, imagino que usted sí tiene la solución mágica.

Nos encanta  hacer juicios y quemar a los “enemigos” en la hoguera digital, pero cuidado, no vaya ser que un día nos toque responder ante un tribunal.