viernes, 25 de septiembre de 2015

Periodismo y desempleo



Justo estaba escribiendo una entrada sobre las ferias de empleo cuando anunciaron el despido de 120 trabajadores de Canal 9, el cual afecta a muchos colegas, a una de ellas la conozco personalmente, a otros, solo por cuestiones de trabajo.

El 9 ofrecía un buen contenido de noticias, lo que más me alegraba era que no contrataron a los mismos de siempre, sino a caras frescas, muchos de ellos dando sus primeros pasos y me encantaba que no cubrieran espectáculos ni vídeos de Youtube.

Periodismo es una de las carreras más saturadas y menos respetadas en el país,  nos ven como chismosos con título o creen que vamos a todas las fiestas de este país; en la universidad algunos profesores nos dicen que solo el que ejerce en medios es un periodista, pero a muchos la vida los ha llevado directamente a las agencias y oficinas de prensa, ¿y saben qué?, son excelentes profesionales, así como también lo son quienes están en la redacción.

El cierre del 9 es una demostración más que las empresas no están invirtiendo en publicidad o que buscan contenidos light, de ahí también el cierre de ADN, aunque algunos ex empleados del canal indican que también hubo malos manejos administrativos, pero lo cierto es que se cierra una compañía y 120 profesionales están en la calle, sumándose a los casi 218 mil.

Un querido ex profesor de la universidad indicó que el Colegio de Periodistas (Colper) debe tomar cartas en el asunto, ¿pero cuáles?, es una institución con un bajo perfil en el gremio, no todos los comunicadores están colegiados, ni ellos ni el gobierno pueden obligar a las empresas, medios, instituciones y agencias a abrir equis cantidad de plazas cuando todos dependen de un presupuesto y en el caso del sector privado, del presupuesto de sus clientes.

Leí en el muro de una colega que actualmente hay 1500 estudiantes de periodismo, alguien sugirió que estudien otra cosa, yo les diría que están a tiempo de evitarse dolores de cabeza, es más, soy de la tesis que deberían cerrar las facultades.

En ese mismo post, un querido amigo y colega comentó que se les tiene que inculcar el emprendedurismo, sí, quitar esa mentalidad de empleado, pero entonces, nos vamos a convertir en un país con exceso de asesores de prensa, periodistas freelance, consultores  y más.

Amo mi profesión, pero admito que está más que sobre saturada y con el dolor de mi alma y el corazón partido recomiendo no estudiarla, sí, se necesitan planes de contingencia, pero ¿cuáles?, como diría Cantinflas “ahí está el detalle”.








sábado, 19 de septiembre de 2015

Mujer casi, casi, pero casi engañada


Puede que le parezca argumento de novela, de “Mujer, casos de la vida real”, la “Rosa de Guadalupe” o el programa cursi que se le venga a la mente; puede que al leerlo piense que es un invento, pero no, es verídico, es la historia de una mujer que estuvo a un paso de caer en las garras de un sociópata mentiroso y lo más triste de esto es que muchas han sido víctimas de estos mentirosos profesionales.

Por razones de seguridad ella solicitó el anonimato y no la culpo, unos dirán “pobre”, otros “¡qué mentira!”, mientras algunas expresarán “yo pasé por lo mismo”:

“Hace unos dos años lo conocí en una actividad de trabajo, me parecía un muchacho simpático, decente, caballeroso, nada guapo, te soy sincera, como que tuvimos química, pero aún así algo no me terminaba de cuadrar. Comenzamos a hablar, había muchos temas en común, me contaba que es de padres ticos pero nacido en el extranjero, egresado de una universidad aquí del país y trabajaba para una transnacional, por eso le tocaba viajar mucho y justo en ese momento, le habían comunicado que tenía que ir a Alemania.

Como el viaje aún estaba largo salimos, creo que unas cuatro o cinco veces, no voy a negar que hubo un par de besos pero igual algo seguía sin gustarme, el hombre todo un caballero, no escatimaba en gastos, le gustaban los lugares elegantes y no me dejaba pagar mi parte de la cuenta, toda una novedad para mí porque estoy acostumbrada a correr con mis gastos.

El asunto es que  se fue para Alemania y nos seguíamos comunicado por Messenger y WhatsApp, me decía que era una lástima que no hubo algo más entre nosotros, que estaba muy enamorado de mí, que ojalá llegásemos a formar una familia, porque su deseo es casarse y tener hijos.

Bueno, conversábamos, intercambiábamos correos, obvio que yo seguí mi vida, lo veía como un amigo, la verdad un gran apoyo, en una ocasión tuvimos un pleito porque él quería que le mandara unas fotos ‘bonitas’ y yo me negué, entonces me dijo que si no era yo había otra chica que sí estaba dispuesta y como ese día yo andaba de malas pues alguna grosería le contesté y cortamos la comunicación como por unos cinco meses, hasta que otra vez retomamos los correos y mensajes.

Yo empecé a salir con alguien, como era mi amigo se lo conté y claro, no le hizo mucha gracia, hablábamos del trabajo, del estudio, la familia, de sus viajes, etc; seguía diciéndome que sentía algo por mí, si mi relación era seria y que estaba planeando un viaje a Costa Rica, que ojalá nos viéramos y que si podría pasar algo más entre nosotros, a lo que le contesté sinceramente que ni idea.

Notaba que era muy insistente con ese temita, parecía carajillo de 15, ya aburría y varias veces le  hice ver que me sentía presionada; repetía  lo de su anhelo de tener una familia propia, tiene 41, entonces manifestaba que su tiempo se agotaba, ahí me di cuenta que no solo a las mujeres les aterra el reloj biológico y les da miedo quedarse “para vestir santos” y sin hijos.

Te soy sincera, a mi la maternidad no se me da, así que de nuevo me sentía incómoda con esa necedad. Incluso me contó que una amiga le pidió tener juntos un bebé, le  expresé que esa era su oportunidad de cumplir ese sueño, pero él no quería ser un simple donador de esperma, quería matrimonio y toda la cosa, como ven, aparentaba ser muy formal.

Un día me llegó un correo de él, pero no reconocí el asunto, cuando me pongo a leerlo, ¿y acaso era para mí?, era para una amiga/casi novia, ¡yo estaba en shock!, sus conversaciones eran una copia al carbón de las nuestras: las ganas de ser padre, de que sentía solo y un tanto urgido, las famosas fotos para motivarse y el cuento de la amiga, solo que esta pobre criatura sí reaccionó indignada, hasta le reclamó por eso y le preguntó si esa famosa muchacha sabía de su existencia, ¡ah pecado!

Yo me reí, me reí y me reí, gracias a Dios estaba sola en la oficina porque eran carcajadas, leí y releí el mail, luego le escribí que estaba dolida, lo creía un amigo, un caballero, no entendía cómo decía sentir amor por mí cuando también pulseaba a otra.

Por supuesto él lo negó todo y en su “defensa” indicó que me mandó el correo para que yo viera que era ella quien le pedía un hijo, como buen sociópata mentiroso, la culpa la tiene otro, menos él.

Pensé por un momento en mandarle copia oculta a ella, pero ¿para qué?: no teníamos una relación sentimental ni ocasional, solo amigos, bueno, al menos eso creía yo, actualmente salgo con alguien, ¿y me voy a comprar una bronca con otra por un tipo que no vale la pena?

Imagino que algunos dirán que esto es mentira, pero vos viste los correos y mensajes, y lo más triste es que esta historia se repite en muchas mujeres, damas que han sido presas de mentirosos, porque una cosa es que te sean infiel, pero otra es darte cuenta que sos la segunda o tercera en la lista y con la mismitica historia.

Con razón los datos que había averiguado de él no me coincidían: el carajo aparece registrado aquí, no en el extranjero; pero, como era solo una amistad, no le tomé importancia.

Señoritas, si ustedes tienen un “amigo” que les dice machilla, quiere tener “bb” o devorar, les digo una frase de un anuncio que salió hace muchos años y que recuerdo era acerca de seguridad personal: ¡ojo, mucho ojo, qué no la engañen!

A quienes han pasado por esta situación, es un trago amargo, pero se supera, no es culpa de ustedes, estos carajos son tan hábiles que Hollywood y Criminals Minds se les quedan atrás; tengan un poquito de malicia, no se vayan de buenas a primeras.

Puede que algunos se pregunten ‘bueno, si en realidad eran solo amigos, ¿por qué tanto alboroto?’, porque una persona tan falsa no merece ese título, porque ni idea si los consejos que me daba eran sinceros  y si mintió al explicarme que esa pobre criatura es quien le pide un hijo, al rato y dice que yo lo acoso y lo quiero de semental.

No, esto no es un invento, es una historia de la vida real.”


sábado, 12 de septiembre de 2015

Lo que todo tico debe hacer

Costa Rica es un país hermoso, de eso no hay duda, según los extranjeros somos amigables, hay algunas situaciones que nos marcan de por vida y para muchos, si no las hiciste, no sos tico, ¿qué es lo que todo habitante de este pedacito de tierra debe hacer, qué son esas experiencias que nos identifican como costarricenses?, a continuación algunas respuestas:

  • Tirarse en cartón por una ladera
  • Haber ido aunque sea una vez a las fiestas de Zapote
  • Viajar en la Periférica
  • Conocer Ojo de Agua
  • Haber participado en elecciones infantiles
  • Comer arroz con pollo, frijoles molidos, ensalada rusa y papas tostadas
  • Haberse comido un casado con macarrones o ensalada de caracolitos y por supuesto, en una soda del Mercado Central y de postre… helado de sorbetera
  • Ir a ver la etapa final de la Vuelta Ciclística a Costa Rica, aunque no sepa nada del deporte
  • Viajar en tren y ojalá haber logrado un paseo a Puntarenas
  • Todos vacilamos con el huevo duro y el fresco de sirope en una botella plástica de gaseosa, pero seamos sinceros, un paseo sin eso no es paseo
  • Visitar una reserva indígena
  • También Río Celeste, las termales de San Carlos, la Catarata de la Paz, volcán Poás, Irazú y las cavernas
  • Ordeñar una vaca
  • Comer chifrijo
  • Saborear un churchill del puerto
  • Paseo a La Sabana
  • Hacer tamales en diciembre
  • Comerse una bolsa entera de jocotes o cases
  • Pic nic en algún potrero
  • Conocer el parque de Zarcero, tomarse una foto y comer arracache, bizcochos y queso palmito
  • Degustar un vigorón
  • Irse de paseo a Pérez Zeledón y pasar a  Chespiritos
  • Visitar el Monte de la Cruz o Tarbaca y comer hongos
  • Merendar pozol en el turno del Convento de los Hermanos Capuchinos de Cartago


PD: un agradecimiento especial a Rosa Fernández, Sandra Zumbado, María Antonieta Benavides, Ingrid Céspedes, Katherine Ledezma, Wendy Villalobos, Marcela Rojas,  Priscilla Fonseca Beer, Minor Delgado, Isabel Mata, Rita Campos y Marcela Rojas por sus aportes.

viernes, 4 de septiembre de 2015

El centro del universo





Así como todos conocemos a alguien que se lleva bien con el mundo entero, menos con uno, igual conocemos a alguien que parece ser el centro del universo; no me mal entiendan, hay personas que atraen las miradas, que no pueden pasar desapercibidas, se roban el show.

Pero hay otros que se creen el Sol, sí, esa persona que, cómo no sé, pero logra tener cerca un séquito de seguidores y convencer a más de uno de cumplir su voluntad, esa persona cuyo tema favorito es él o ella, esa persona a la que es casi imposible llegar y contarle algo porque siempre atravesará el caballo y la conversación será un monólogo de su vida, muy aburrida de por cierto.

Exceso de atención en su casa dirían unos; fijo hijos únicos dirían otros (otro estereotipo); baja autoestima expresarían por allá, así que para poder entender un poquito por qué esa persona actúa así, le hice un par de preguntas a las psicólogas Marjorie Aguilar y Gabriela Sibaja para que ellas nos orientaran en este tema y no juzgar a priori.

La primera es qué lleva a un ser humano a creer que solo su persona es importante y que el mundo debe detenerse ante sus problemas, Gabriela Sibaja comentó que eso depende de muchos factores y de la manera en que exprese esta afirmación, en qué contexto lo hace y cómo se lo hace saber a los demás,  “puede ser que esté buscando atención, una baja autoestima, que lo use como vía de escape  o que nos encontremos frente a una persona con una situación como un trastorno de fondo”.

Por su parte, Marjorie Aguilar indica que es un asunto de existencia humana y empatía: “en el momento que existo y tengo conciencia de ello,  todo va a girar en torno a esa existencia, incluso los problemas.  Se une con la capacidad empática de todo ser humano, algunos seremos  más empáticos y tenemos conciencia del problema del otro; mas otros no.  Dependerá de rasgos de personalidad, sociabilidad y experiencia humana”.

Una característica típica es que estos soles terrestres se sientan y te cuentan su vida y milagros, y los de su familia, a veces son detalles tan íntimos que uno por dentro dice “creo que puedo vivir sin esa información” y uno quiere hacerle entender al rey de la conversación que se está pasando de indiscreto, sin embargo, ambas especialistas coindicen en que no hay recetas para manejar esta situación, pero la buena comunicación y las conductas asertivas son muy útiles.

Cuando alguien que no pertenece a ese club de fans se aleja del rey del momento, argumentan que esa persona lo cansa con sus quejas, como que le roba la energía, la máster Aguilar expresó que más que robar energía positiva, lo que hacen es removerle a uno situaciones pasadas y éstas son las que nos bajan emocionalmente, por lo que es mejor alejarse.

“En ocasiones se le presta atención emocional a ciertas personas o situaciones que nos pueden hacer sentir en un estado de agotamiento, de tristeza o de desgaste. Es importante aprender a identificar este tipo de situaciones y de personas para no asumir más de la cuenta”, aconsejó Sibaja.

Tratar con alguien así es complicado, pero igual ambas psicólogas lo que recomiendan es paciencia: “el ególatra lo que esconde con su conducta es una inmensa fragilidad emocional  y solo mira la realidad a través de su infalibilidad.  Por lo que no debemos intentar cambiarlo.  Es no adularlo, idolatrarlo, más tratarlo como un individuo común, sus historias verlas normales y probablemente éste sea el que se retire o acepte tu naturalidad al aceptarlo”, indicó Marjorie Aguilar.

Por su parte Gabriela Sibaja declaró que hay que desarrollar una relación cordial que se enmarque dentro del respeto, no exagerar en la atención que se le preste y evitar una relación tensa de confrontaciones, sino conocer acerca de este tipo de personalidad y saber qué esperar.

Ya lo saben, si están cerca de una persona así traten de no criticarlo, más bien tenerle paciencia y no darle mucha pelota.