domingo, 29 de enero de 2017

“No me gusta estar sola”

Iba un día de estos en el bus, detrás de mí fulana y mengana conversando:

Fulana: ya está todo listo para la despedida de zutana, ya tenemos la reservación, “x” va a comprar los sombreros y antejos y “y” va a hacer el marco para las fotos, va a estar demasiado chiva…
Mengana: ¡ah bueno!, fulano y yo llegamos como a las 9 entonces, es que primero....
Fulana: ¿cómo que fulano?, a ver, ninguna va a llevar pareja, ni siquiera perenceja que está recién casada.
Mengana: ¡ah no, qué pena con ustedes!, pero ese mae va conmigo, para eso me lo conseguí, para no andar sola, eso de parejas que salen cada uno por su lado nada qué ver…

La conversación siguió, pero en mi mente quedó grabada esa última oración: “para eso lo conseguí, para no andar sola”, ¿cuántas veces hemos escuchado o dicho esa frase?, ¿cuántas veces  hemos depositado nuestras inseguridades en una relación sentimental, de amistad o incluso un trabajo con tal de no quedarnos solos?

Pareciera que, primero, las personas le tienen pánico a su propia compañía, verse solos ya sea en la casa o en una reunión es pero aterrador, sí, es lindo compartir, qué aburrido estar en una fiesta y no tener con quien conversar o bailar, pero el tema aquí es el miedo de estar con uno mismo.

Y es que no importa que estemos en la mejor compañía y en el lugar más bello de este mundo pasándola de lo mejor, si yo estoy incómoda con yo se me va a notar y me será imposible disfrutar del momento.

Este tema ya lo he tocado muchas veces y he recibido más de una crítica de personas cercanas a mí ya que según ellos les mando indirectas y les paso diciendo que se vayan solos a la playa o a un bar y no es eso, si lo quieren hacer se los recomiendo por cierto, es toda una experiencia. O también que critico el compartir con los demás, ¡tampoco!

El punto es el miedo a mi compañía, el pánico a mi yo, la necesidad de estar con alguien, el terror que se le tiene a la palabra “independencia” cuando se está en una relación; mientras yo le tenga miedo a yo, el mundo me parecerá un lugar terrible y me aferro a lo qué sea y  a quién sea, aunque me dañe.


No quiero hacer muy larga esta entrada, así que les dejo este link de una charla de Walter Riso titulada “La soledad afectiva”, no soy fans del él, pero lo que dijo me pareció súper interesante: Si no sabemos manejar la soledad, si no estamos acostumbrados a ella o si le tememos, seremos personas vulnerables en el amor, predispuestos a padecer con más intensidad el dolor de una separación, de una infidelidad o de un rechazo afectivo. https://www.elartedesabervivir.com/guias/como-afrontar-la-soledad-afectiva-29

domingo, 15 de enero de 2017

La hoguera digital



Como periodista titulada me ha tocado entrevistar a varios políticos, recuerdo que uno de ellos me dijo “nosotros siempre seremos culpables sin juicio, todo lo que hagamos estará mal”, esa frase se me quedó muy grabada.

Desde que tengo memoria recuerdo “conversaciones” en donde las personas simplemente despotrican: “es que fulano es un ladrón, corrupto, vago, claro por eso busca la muni (diputación, presidencia, lo que sea)”, estar en un puesto público no es sencillo, menos con cuatro millones de todólogos expertos con estudios en las mejores universidades del mundo y millones de millones de títulos.

El año pasado la Ministra de Justicia Cecilia Sánchez anunció la liberación de varios privados de libertad, automáticamente se convirtió en la villana de una sociedad que primero es machista; segundo, no tolera ver a una mujer en un puesto de autoridad; tercero, todo lo critica porque es perfecta y ellos sí tienen la solución, ellos sí saben.

Sánchez lidia con el tema de las cárceles, hace poco contó que recibió amenazas de muerte y violación, ya una vez un medio reseñó el “enfrentamiento” entre ella y un caballero por el tema de la liberación de privados de libertad.

Ahora vuelve a serlo, otro “hombre” le mandó un mensaje privado en dónde pide que ojalá le pase eso a ella y a su familia, los dañen a todos y otras perlas más (http://www.laprensalibre.cr/Noticias/detalle/100137/joven-llama-a-ministra-de-justicia:-pellejo-andante,-momificada)

Asumo que este señor es un experto en materia judicial, legal, toda una autoridad en materia carcelaria y que en su casa le enseñaron que así se dirige no solamente a una mujer, sino a una Ministra de Estado.

Por default el político (ministro, presidente, diputado, alcalde, etc) es mi enemigo, es un delincuente y yo tengo todo el “derecho” de expresarme de él con lo peor de mi léxico.

En diciembre José María Figueres publicó un vídeo en Facebook donde entre otras cosas mencionó que hay gente que lo trata de hijueputa, unas seis personas interpusieron recursos de amparo por semejante atrevimiento, pregunto: ¿qué pasaría si él o cualquier otro político, amparado por el Estado de Derecho, denuncie a quiénes lo llaman ladrón o corrupto?, porque los están acusando de un delito, eso se llama calumnia, ¿tendrán pruebas que respalden su berrinche, digo acusación?

Sinceramente señores, ¿la figura política es mi enemiga por qué?, ¿no me hace caso, no hace lo que yo quiero, lo escogieron a él o ella y no a mí?..

Ver estas expresiones da lástima, me parece que el tico puede ser más educado y sobre todo maduro, si usted no está de acuerdo con alguna directriz nada pasa, si usted cree que el ministro se la está “pelando”, perfecto, imagino que usted sí tiene la solución mágica.

Nos encanta  hacer juicios y quemar a los “enemigos” en la hoguera digital, pero cuidado, no vaya ser que un día nos toque responder ante un tribunal.